En verdad no he incluido lo más importante pero todo esto también ha estado muy bien:
1. El curioso incidente del perro a media noche fue mi compra de rigor en el día del libro de este año, pero no fue hasta el mes pasado cuando me planté frente a él. Probablemente aún no me acerque a comprender como funciona la mente de un Asperger, pero me encantó la forma en que Mark Haddon nos lo intenta dejar un poquito más claro.
2. También estas últimas semanas me he no sólo reconciliado si no que un poco obsesionado con las acuarelas gracias al Aquash Water Brush de Pentel, un pincel con depósito de agua incluido y fibras sintéticas que va de maravilla y permite pintar de forma muy limpia y con bastante precisión, (5€ aprox).
3. No podía faltar en la lista mi viaje a Rumania, un destino que unos meses atrás ni siquiera barajaba y que me sorprendió más que gratamente. Las casas son de colores pastel y los Kinder Buenos cuestan 40 céntimos, ¿que más puede una pedir?
4. Por otro lado Years & Years han sido sin lugar a dudas la banda sonora de mi verano. He perdido la cuenta de las veces que he bailado King incluso en el sitio, y es que amigos, qué bien su disco, de verdad, qué BIEN.
5. Pero también otra de las cosas que más me han gustado de estos meses ha sido la idea, o más bien la realidad y confirmación, de que sé sobrevivir con únicamente lo que cabe en una maleta de mano. Un pasito más hacia la no dependencia material.
6. Y por último en cuanto a manjares, apuntad: bacon, mozzarella, queso de cabra, orégano, tomate natural y pesto. Nada puede salir mal con tanta cosa favorita junta. Na-da. Excepto que todos los restaurantes de La Piazza PaPa nos pillan a una frontera de distancia.
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