Si me dan a elegir, seguramente los
thrillers
psicológicos seguirían ocupando el puesto de favorito, vease las
películas de Nolan o todo lo que se le parezca y tenga un buen
final de los que te dejan con la boca abierta queriendo darle al play de
nuevo para no dejar detalle en pie. Sin embargo, una parte de mi es
amante de esas peliculas
¿indies? llenas de pinceladas de romanticismo que, sin caer en lo ñoño
ni en los tópicos, son bonitas hasta
decir basta. Historias de amor -o no tanto-, guiones diferentes,
algunos toques cómicos, bandas sonoras perfectas y un cierre sobre el futuro
de los protagonistas abierto a la propia interpretación. El trabajo de
los directores de fotografia suele ser además más que destacable en este
tipo de cintas, lo que las hace aún más especiales si cabe. La luz y
los colores dicen sin duda mucho más de lo que se cree, basta con
echarle un ojo a este tumblr para comprobarlo. Os
dejo con algunas recomendaciones:
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BLUE VALENTINE (2010) // Con
un aire muy íntimo, juega con la línea temporal de la relación de Dean y
Cindy: inicio, apogeo y decadencia a través de la particular visión de
él, que por cierto, es Ryan Gosling, y bueno, eso es un
plus para qué engañarnos.
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JUNO (2007) // Embarazada
a los 16, pero bastante lejos de ser un programa de la MTV o la típica cinta de instituto americano. Lo mejor de Juno es como, hasta los
momentos de más drama, se han sabido llevar de forma ligera y cómica sin
olvidar el sarcásmo característico del personaje de Ellen Page. Eso, el teléfono-hamburguesa y lo pegadiza que es Everyone else but you claro.
(Post originalmente publicado en urbanandtrendy.com)
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